La Cueva del Agua

En las entrañas de la roca altiva

que sostiene el santuario milagroso

despliegas tu abanico portentoso

sabiamente tallado en roca viva.

Ocultas en tu seno las bellezas

que en tu monstruosa arquitectura finges

un gigante, un dragón, unas esfinges,

piedras raras pregonan tus grandezas.

Son tus estalactitas caprichosas,

ataviadas con capas verniciosas

como santos que van en procesión;

y entretanto la voz del agua canta

una vieja leyenda dulce y santa

que ha cautivado nuestro corazón.

                       Rafael Láynez Alcalá

                      26 de enero de 1.924

    

     Situada en un impresionante desfiladero cargado de historia entre el Cerro de Don Pedro y el  Monte del Caballo que es la prolongación del Caballo de las Carboneras, es conocida también con el nombre de Gruta de las Maravillas o Cueva de la Virgen de Tiscar porque según la tradición, allí se aparecía la Virgen de Tiscar.

Desfiladero y Cueva del Agua

A la izquierda Cerro de los Canjorros.
A la derecha el Santuario de Tiscar

   El Cerro de Don Pedro y el Caballo de las Carboneras son dos enormes murallas rocosas, bajando la primera desde lo mas alto de la Cuerda de la Calera y la segunda desde el mismo Puerto de Tiscar. Donde se fundes estas dos agrestes murallas rocosas, las aguas del Arroyo Vadillo han ido horadando la roca a lo largo de los siglos, formando un enorme salto o cascada y una amplia cavidad rocosa.

   Se trata de una interesante formación caliza, declarada Monumento Nacional en 1.989, donde se funden el agua del río Tiscar y la roca del Monte del Caballo formando saltos, pilones, cascadas y fuentes, para seguir su curso zigzagueante río abajo hasta llegar al idílico Pilón Azul camino de la aldea de Belerda.

   Tras bajar 40 escalones, se accede a la Cueva por un pequeño túnel artificial de unos diez metros de largo y un metro de alto aproximadamente.

   Un cartel nos indica el lugar donde nos encontramos

   Al finalizar este pasillo, nos encontramos de lleno con la cueva con enormes paredones, frondosa hiedra, verdoso musgo y grandes estalactitas que pregonan el paso del tiempo. La majestuosidad es impresionante y lo que tenemos ante nuestros ojos, comunión de roca y agua, es una prueba evidente de la existencia de Dios.
    Si alzando la vista hacia arriba después de bajar otros 135 escalones nos encontramos con el Santuario de la Virgen, ahora tenemos ante nosotros y podemos contemplar lo que es un verdadero Santuario de la Naturaleza.

    En un lateral de la Cueva y en un abrigo de muy difícil acceso, se encuentra una imagen de la Virgen de Tiscar, la Virgen de la Sierra, como recuerdo al lugar donde se apareció por primera vez.

   Realmente impresiona observar desde abajo el lugar donde se encuentra esta pequeña talla de la Virgen en la Cueva del Agua, pero cuando era adolescente, fueron muchas las ocasiones que subí hasta allí junto a mis amigos Pedro y Ventura.

Imagen de la Virgen en la Cueva del Agua

A implorar tu amor de Madre

vienen tus hijos

a los pies de tus altares

los desvalidos

que dichosos se consuelan 

sólo en la vista

de nuestra excelsa Patrona

Virgen de Tiscar

Allá en la Gruta, donde Tú moras

preciosa ermita, canto de amor

dice la historia, de antaños tiempos

que fue un milagro, tu aparición.

  

  El agua y el tiempo, que son los mayores y mejores escultores de la Naturaleza, han esculpido a base de estalagtitas y estalagmitas las paredes de la Cueva, convirtiendo estas oquedades en un lugar privilegiado para anidar las palomas.

Envidia te tengo paloma,

que en la Cueva del Agua tienes tu palomar.

Tu, que vives junto a la Virgen de Tiscar.

Tu, que eres libre para volar en paz.

Si tienes hambre, a la era de Don Pedro acudes,

si sietes sed, al Pilón Azul vas.

¿Que  puedes pedir mas?

                                                     Pablo Vargas

Ntra. Sra. de Tíscar: Una Virgen milagrosa

  " ...Y sigue con lentitud la marcha triunfal de la Virgen de Tiscar; la procesión va faldeando las abruptuosidades de Peña Negra y el Castillo; y la multitud no cesa en sus aclamaciones fervorosas, mientras no cesan las campanas de cantar y restallar los cohetes. Al regresar al santuario, la Virgen lleva sobre el trono un niño cieguecito; la masa humana se mueve pesadamente; es imposible la entrada al templo; la Virgen, mirándonos a todos parece que sonríe.
    Arrecia el entusiasmo popular, se mueven jadeantes los que portan el trono, todos esperan el milagro y el milagro se ha hecho; el niño paralítico y ciego ha cogido el manto de la Virgen; lloran unos, todos nos emocionamos y pausadamente, dificilmente, los devotos se agolpan a las puertas del templo llevando sobre sus hombros la Virgen milagrosa." (Fragmento del artículo publicado por Rafael Láynez Alcalá en el diario La Regeneración en 1920 titulado La Romería de Tiscar)

    En toda la comarca del Guadalquivir e incluso en provincias limítrofes, es inmensa la devoción que se tiene a la Virgen de Tiscar siendo innumerables los milagros reconocidos que las contiendas y el paso del tiempo se han encargado de borrar de la mente de sus devotos y de los documentos antiguos escritos y hoy desaparecidos.

     Según cuentan la tradición y la leyenda, la Virgen de Tíscar obró el primero de sus milagros en el año 1.319 en medio de un paraje natural de incomparable belleza y de nombres cargados de fuerza lírica: Peña Negra, Vadillo, Pilón Azul, Puerto de Tiscar, Cerro el Caballo, Valle de D. Pedro, Cañada de Tiscar, Cueva del Agua...Todo ello conforma un enclave puramente serrano y realmente bello, que con su marco natural ha servido, a lo lo largo de los siglos, para acrecentar la devoción y la pasión por la Señora de Quesada.
     En ese lugar, en medio de este paisaje paradisíaco, habría tenido lugar la milagrosa aparición de la Virgen. Se habría aparecido en la Cueva del Agua, hoy llena de exvotos en honor de la Virgen, entendidos como ofrendas dejadas por los fieles que han recibido un don o curación como ofrenda y recuerdo. Es fácil ver en este lugar trozos de cabellos, fotografías, pulseras, velas, etc, además de las ofrendas que se hacen a la Virgen como donativos en metálico (los billetes son pinchados con alfileres al manto de la Virgen), joyas, mantos, objetos de adorno o animales vivos.

Exvotos en la Cueva del Agua

                                                                               Velas en la Cueva del Agua 

Mosaico de exvoto en la fachada norte del Santuario

Exvoto. Año 1950
Rafael Zabaleta 
Museo de Quesada

        También son muchas las personas que depositan en una hornacina del Santuario una carta solicitando algún favor o en acción de gracias.

    
    Es difícil saber si la aparición se verificó ya en los años que media entre la toma de Quesada por parte de San Fernando en 1224 y la reconquista musulmana que se verifica en 1295, pero la costumbre comúnmente aceptada fija en el año 1319 la relación de la Virgen de Tíscar con el pueblo de Quesada y con los otros pueblos del Adelantamiento.
 

     En 1310 Quesada pasaría nuevamente, y de manera definitiva a la Corona de Castilla. 
   Según una de las muchas leyendas piadosas que adornan la devoción a la Virgen de Tíscar, en 1319, poco antes de la toma definitiva por parte de Pedro de Castilla de Tíscar, Huesa y Belerda, la imagen de la Virgen de Tíscar se le apareció a Mohammed Andón, Caudillo del Castillo de Tíscar, pidiéndole que rindiera la plaza ante las tropas castellanas y se convirtiera al cristianismo, pues lograría así salvar muchas vidas.

   El musulmán, confuso, se habría llevado la imagen hasta la fortaleza, explicándole a los suyos lo sucedido. Pero la soldadesca del castillo, poco fiada en milagros de una Virgen cristiana y convencidos de que la presencia de la Virgen en el castillo recrudecería el interés de las tropas cristianas por tomar la plaza, decidieron lanzar la Virgen al vacío desde lo alto de los torreones.

   

En las agrestes y altas montañas de TISCAR

quisiste buscar el CONSUELO de los desfavorecidos,

el ROCÍO alegre de la fresca mañana,

y allí quedarte para siempre 
para escuchar el discurrir de esas aguas cristalinas... que van a parar a la MAR

                                                                                                            Pablo Vargas

   Historia o leyenda, según la piadosa tradición, tantas veces como lo hicieron, volvió la Virgen a la fortaleza musulmana, hasta que después de que ni aún tirándola a pozos profundos la imagen desapareciera, los musulmanes la hicieron pedazos. Tomado el castillo de Tíscar por los cristianos, estos mandaron a Toledo los restos de la milagrosa Virgen para que fueran recompuestos por expertos orfebres, pero la Virgen volvería a su gruta de manera milagrosa e intacta. Y a partir de ahí, la Virgen gótica con el Niño Jesús en sus brazos, quedaría ligada de manera irremediable al pueblo de Quesada y a todos los de los alrededores, devoción que se acrecentaría a partir del siglo XVI hasta nuestros días.

    Otro de los milagros que se atribuyen a la Virgen de Tiscar se lo escuché contar hace muchos años a Carlos el santero. Corría el año 1.909, cuando un joven de Belerda llamado Felipe, se tuvo que alistar en el Regimiento Arapiles 62 para participar en la Campaña de Marruecos. Con motivo de la contienda, este joven falleció, dejando viuda a su esposa Juana María y huérfanos a sus tres hijos pequeños. Para colmo de males, la infortunada Juana María quedó ciega, viéndose imposibilitada para trabajar y poder alimentar y sacar adelante a sus tres hijos. Desesperada por esta situación, decide una mañana subir al Santuario a implorarle ayuda y misericordia a la Virgen de Tiscar y aunque la conversación que hubo entre ambas siempre será una incógnita, lo cierto es que cuando Juana María salió a la plaza después de terminar sus rezos y súplicas, recobró la vista.

    

Coronación de la Virgen de Tiscar

     Había sido tanto el éxito  de la peregrinación que hizo la Virgen por los pueblos del Arciprestazgo de Cazorla durante los meses de mayo y junio de 1.949 y tanto el amor y la devoción que demostaron a la Virgen todos los habitantes de los pueblos visitados por la Virgen Peregrina, que revive la antigua idea de poder coronar la imagen de la Santísima Virgen.    

     La Junta Pro Coronación de la Stma. Virgen de Tiscar estaba formada por las siguientes personas:

D. Antonio Rodríguez Aguilera

D. Enrique Bedoya Serrano

(Miembros fallecidos de la Junta Pro Coronación)

PRESIDENTE NATO

Rvdo. Sr. D. Manuel Alejo Vallejo

PRESIDENTE

D. Bienvenido Bayona Ferenández

TESORERO

D. Antonio Navarrete Magaña

SECRETARIO

D. Cesáreo Aguilera Herrera

VICESECRETARIO

D. Framncisco F. Jiménez Tiscar

VOCALES

D. Tomás Malo Marín

D. Bernardo Aguilera Jerez

D. Diego Dueñas Jiménez

D. José María Sánchez Pérez

D. Prudencio Dueñas Jiménez

COMISIÓN DE FESTEJOS

D. Basilio Rodríguez Aguilera

D. Juan Ortíz Bedoya

COMISIÓN DE PROPAGANDA

D. Angel Herreros Galán

D. Gregorio Martínez Almansa

D. Pedro Malo García

COMISIÓN DE CULTOS

D. Juan Ramón Cruz Martos

D. Jesús Martos Palacios

COMISIÓN DE ARTE Y ORNATO

D. Rafael Zabaleta Fuentes

D. Juan José Trujillo del Barco

COMISIÓN DE PROTOCOLO Y RECEPCIÓN

D. Eufrasio Garvín Martínez

D. Francisco Sanjuán del Real

D. Laureano Villar Delgado

D. Francisco Sanmartín Medina

D. Diego Aguilera Herrera

D. Luis G. de Cabiedes

COMISIÓN DE CARIDAD

D. Ramón Dueñas Jimenez

D. Manuel García Carriazo

D. Jaime Palop Marín

COMISIÓN DE POSTULACIÓN Y HACIENDA

D. Trinidad Alferez Jimenez

D. Blas García Quesada

  
                                                                                      (Foto: Instituto de Estudios Giennenses)

     Nuestra Señora de Tiscar, fue coronada canónicamente en la mañana del día 29 de septiembre de 1.954, por el Cardenal Primado, D. Enrique Pla y Daniel, Arzobispo de Toledo, asistido por el Obispo de Jaén, D. Félix Romero Mengíbar.

    Con motivo de la coronación, al que se dice que asistieron alrededor de veinticinco mil personas, se organizaron una serie de actos, comenzando estos el día 25 de septiembre con la traída de la Virgen desde Tiscar a Quesada, volviendo al Santuario el día 30.

     Fueron padrinos de la Coronación el entonces Ministro de Hacienda D. Francisco Gómez de Llano y su esposa.
   Era Presidente de la Cofradía de Ntra. Sra. de Tiscar D. Tomás Malo Marín y Alcalde Quesada D. Cesáreo Aguilera Herrera
    El Presidente Tomas Malo, para esta ocasión, escribió este artículo que titulaba A ti, a tus hijos, a Quesada: 
     "Gracias, Señora, porque permites tu Coronación Canónica en este Año Santo que el mundo católico te dedica para ensalzarte como Madre del Hijo y Madre nuestra; porque aceptaste el afán incontenible que nos lleva a Ti con ofrenda de Amor limpio y sincero.
Gracias a los hermanos todos de tu Venerable Cofradía que, con su trabajo y oraciones, fueron puntales de esta empresa de tu Coronación.
Gracias a tanto hijo tuyo, desvelados en el empeño de verte coronada, consejeros de la mejor idea para honrarte y servirte.
Gracias anticipadas a tu noble pueblo que será acogedor con quienes vengan a verte, peregrinos de Amor y Lealtad; al pueblo de Quesada que creció al abrigo de tu devoción y sabrá dispensar al forastero las galas de sus atenciones y hospitalidad, para que en ellos perdure el recuerdo de tu Coronación, hermanado con el de la hidalguía de quienes eres Patrona.
Gracias, Madre mía, por el honor que nos das estando a tu servicio, por tu ayuda constante en la misión confiada. Que tu corona, brillando sobre tus sienes benditas, sea para los hombres el signo de tu Gloriosa Maternidad".

El Cardenal de Toledo y el Obispo de Jaén en el momento de colocar la Corona

El Cardenal Primado de España, regidores y público el día de la Coronación

    La persona encargada de pronunciar el pregón de la Coronación el día 25 de septiembre de 1954 fue el poeta, escritor y Presidente efectivo de la Junta Pro-Coronación elegida para estos actos D. Bienvenido Bayona Fernández. Nacido en Quesada el día 4 de enero de 1.915, fue además Presidente de la Cofradía de Nuestra Señora de Tiscar de diciembre de 1954 a diciembre de 1956 y de febrero de 1965 a marzo de 1967.

Placa conmemorativa de la Coronación situada en el interior del Santuario

 Formaban parte de esta Junta efectiva distinguidos quesadeños, entre los que quiero destacar a miembros de la familia Dueñas, a la que me unen lazos familiares, y al ilustre pintor de la tierra Rafael Zabaleta.


       La Junta de Honor de la Coronación Canónica de la Stma. Virgen de Tiscar estaba compuesta por las siguientes personas:

D. Federico Bayona Ortíz

D. Tomas Bedoya Serrano

(Heremanos de número de la Cofradía de Ntra. Sra., Caídos por Dios y por España)

PRESIDENTE DE HONOR

Emmo. y Rvdmo. Sr. Cardenal Pla y Deniel

(Arzobispo de Toledo, Primado de las Españas)

MIEMBROS DE HONOR

Excmo. Sr. D. Francisco Gómez de Llano

(Ministro de Hacienda

Excmo. Sr. D. Joaquín Ruiz Gimenez

(Ministro de Educación Nacional)

Excmo. Sr. D. Rafael Cavestany

(Ministro de Agricultura)

Excmo. Sr. D. Antonio Iturmendi Bañales

(Ministro de Justicia)

Excmo. Sr. D. Raimundo Fernandez Cuesta

(Ministro Secretario General del Movimiento)

Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Rafael García y García de Castro

(Arzobispo de Granada)

Excmo. Rvdmo. Sr. D. Félix Romero Menjibar

(Obispo de Jaén)

Excmo. Rvdmo. Sr. D. Francisco Miranda Vicente

Obispo Auxiliar de Toledo)

Excmo. Rvdmo. Sr. D. Rafael Alvarez Lara

(Obispo de Guadix)

Excmo. Sr. D. José Alberto Palanca

(Director General de Sanidad)

Excmo. Sr. D. José Macian Perez

(Director General de Regiones Devastadas)

Excmo. Sr. D. Fernando Coca de la Piñera

Director General de Previsión)

Excmo. Sr. Conde de Argillo

Excmo. Sr. Marqués de Villaverde

Excmo. Sr. D. Carlos Asensio Cavanillas

(Teniente General del Ejercito)

Excmo. Sr. D. Felipe Arche Hermosa

(Gobernador Civil de Jaén)

Excmo.Sr. D. Manuel González Eady

(Gobernador Militar de Jaén)

Excmo. Sr. D.  Juan de Mata Carriazo Arroquia
(Catedrático Universidad de Sevilla)

Excmo. Sr. D. Rafael Láynez Alcalá
(Catedrático Universidad de Salamanca)

Ilmo. Sr. D. Ricardo Villegas Herrera
(Presidente de la Diputación de Jaén)

Ilmo. Sr. D. Juan A. Linares
(Presidente de la Audiencia de Jaén)

Ilmo. Sr. D. Angel Morán
(Dignidad Maestrescuela de la S.I. Catedral de Toledo)

Ilmo. Sr. D. Julio Pascual
(Presidente de la Academia de Bellas Artes de Toledo)

Ilmo. Sr. D. Angel de la Guardia y Pí
(Fiscal de la Audiencia Territorial de Barcelona)

Ilmo. Sr. D. Cesáreo Rodríguez-Aguilera Conde
(Magistrado)

Ilmo. Sr. D. José Lorente Ruiz
(Procurador en Cortes)

Ilmo. Sr. D. Antonio Sáenz Morrondo
Presidente del Tribunal Tutelar de Menores de Jaén)

D. Ignacio Gómez de la Torre y Díez
(Descendiente de D. Pero Díez, Conquistador de Tiscar)

D. Rafael Hidalgo de Caviedes
(Arquitecto, hijo del ilustre pintor quesadeño del mismo nombre)

D. Rafael Zabaleta y Fuentes
(Pintor de Quesada)

D. José María García Escudero
Ex-Director General de Cinematografía y Teatro)

D. Luis Gutiérrez de Cabiedes
(Hermano de Honor de Nuestra Señora)

D. Jesús de la Riva
(Hermano de Honor de Nuestra Señora)

D. Antonio de la Riva
(Hermano de Honor de Nuestra Señora)

D. Francisco Navarrete
Párroco de San Ramón, de Madrid)

D. Jesús Carcellén
(Último Capellán de Nuestra Señora)

D. Ricardo Moreno García
Ex-Presidente de Nuestra Señora)

D. José Zamora Montalvo
(Hermano de Honor de Nuestra Señora)

D. Ángel Carriazo Arroquia
(Ex-Presidente de Nuestra Señora)

D. Bernardo Villar Delgado
(Hermano de Honor de Nuestra Señora)

D. José Antiñolo Moreno
(Hermano de Honor de Nuestra Señora)

D. Juan de Mata García Carriazo
(Hermano de Honor de Nuestra Señora)

D. Miguel Olmedo Medina
(Notario de Quesada)

D. Esteban Verdes de la Riva
Hermano de Honor de Nuestra Señora)

•     En el interior del Santuario, con motivo de la Coronación de la Virgen, fue colocado un mosaico conmemorativo de este acontecimiento que textualmente dice "el día 29 de septiembre de 1954 fue coronada la Virgen de Tiscar por el Excmo. D. Enrique, Cardenal Pla y Daniel, Arzobispo de Toledo, asistido del Excmo. D. Féliz Romero Mengíbar, Obispo de Jaén, siendo padrinos el Excmo. Sr. Francisco Gómez de Llano, Ministro de Hacienda y la Ecxma. Sra. Dª. Luisa Pellón, su mujer".    Eran miembros de la Junta de Gobierno de la Cofradía:    Rvdo. D. M. Alejo Vallejo.
•     D. Biemvenido Bayona Fernández. Poeta. Presidente de la Cofradía de diciembre de 1954 a diciembre de 1956 y de febrero de 1965 a marzo de 1967.
•     D. Antonio Navarrete Magaña. Poeta. Presidente de la Cofradía de febrero de 1961 a febrero de 1963
•     D. C. Aguilera Herrera.
•     D. Francisco Fermín Jiménez Tiscar. Autor del libro "Ntra. Señora de Tiscar: Historia Leyendas y Crónicas".
•     D. Tomás Malo Marín. Presidente de la Cofradía de noviembre de 1950 a diciembre de 1954.
•     D. Prudencio Dueñas Jiménez.
•     D. J.M. Sánchez Pérez.
•     D. B. Aguilera Jerez.
•     D. Diego Dueñas Herrera.
• 
  
•     Figura también en la placa conmemorativa como hermano de la Cofradía, D. Ramón Dueñas Jiménez, padre de mi cuñado y esposo de Dª. Manolita Alcalá.
•  
  
  
  
  Si por la frente de Cristo
  colocaron, Madre mía,
  con saña y con mala fe
  una corona de espinas,
  también, en la tuya, al tiempo,
  como brasas encendidas,
  colocaron otra igual,
  semejante, parecida.
  Corona de soledad,
  de crueldad enloquecida
  de burla, de ingratitud.
  Corona que todavía,
  pasados ya dos mil años,
  te sigue hiriendo la vida,
  partiéndote el corazón.
  Corona que en cada espina
  hay un cuchillo afilado 
  que se clava y que se hinca,
  que te raja el alma entera,
  que te mata, te acribilla;
  espina de la maldad,
  del crimen, de la injusticia,
  del odio, del egoísmo,
  del hambre, de la desidia,
  de la sed que no se sacia,
  de la venganza que anida;
  espina de ése que sufre,
  de ése que nadie lo cuida,
  de ése que vemos desnudo,
  o en la cárcel, sin familia;
  espina de esos que andan,
  con la frialdad mas indigna,
  cortando rosas al viento,
  sembrando campos de ortigas;
  espina de la calumnia,
  del desprecio y la mentira,
  del mal que vamos sembrando,
  recogiendo cada día...
  Espinas todos nosotros,
  mujeres y hombres espinas,
  clavadas todas a fuego
  en tu frente, Virgen mía.
  
  
  Por eso que aquí en Quesada,
  cansados de verte herida,
  decidieron abrazarte,
  subir a tu frente altiva
  y cambiar esa corona
  por otra mas noble y digna.
  Corona para una Reina.
  Corona para una espiga
  que engendró al Hijo de Dios.
  Corona para una niña.
  Corona para una madre.
  Corona para una cima.
  Corona para un amor
  que empezando no termina.
  
  
  Corona que no es de oro,
  ni de piedras valiosísimas,
  corona para decirte
  que este pueblo, de quien cuidas,
  te quiere mas que así mismo, 
  que por Tí hasta da la vida,
  por Tí, Madre, y por el Hijo
  que nos muestras transcendida
  y llevas en tu regazo
  como quien lleva una Biblia
  para decirnos que hagamos
  cuanto El, siempre nos diga.
  Corona para mostrarte 
  el amor que te prodigan
  tus quesadeños del alma,
  esos que a Tí se arrodillan
  para pedirte y decirte
  que estés cerca de su orilla,
  de su mar, de sus desiertos,
  cerca siempre de sus vidas.
  Corona para soñarte,
  para hacerte mas divina,
  para alegrarte la cara,
  para que siempre sonrías.
  Corona para tenerte
  a cada instante cosida.
  Corona para en la muerte
  nos des serena agonía
  y nos abraces de luz
  para siempre y sin medida.
  Corona para rogarte
  que eternamente nos vivas
  y eternamente nos hagas,
  del alma hasta las cenizas,
  ser de Tí, por Tí y en Tí,
  semillas que fructifican.
  Corona para gritar
  al mundo en sus cuatro esquinas
  ¡Viva la Madre de Dios!
  ¡Viva la Virgen de Tiscar!
                                                                   (Ramón Molina Navarrete)
  
  
      Con motivo del 25 aniversario de la Coronación, el día 15 de agosto de 1979, se celebraron diversos actos para conmemorar dicho evento. En el mismo lugar que se había producido la coronación, se levantó una plataforma celebrándose una Eucaristía presidida por el entonces Obispo de Jaen, D. Miguel Peinado Peinado. Era párroco de Quesada D. Santos Lorente Casáñez.
•     Para conmemorar el 50 aniversario de la Coronación, durante el primer fin de semana de octubre del año 2004 también se realizaron diferentes actos comenzando el día 1 de octubre con un pregón que corrió a cargo del miembro de honor de la comisión organizadora, D. Francisco de Asis Martín Fernández de Heredia. El sábado día 2, se llevó a cabo la Traída de la Virgen de Tiscar a Quesada, recibiéndola en la Cruz del Humilladero, con procesión, santa misa y salve. La celebración principal se produjo el domingo día 3 con una Eucaristía oficiada por el administrador diocesano del Obispado de Jaen, D. Rafael Higueras, en la Plaza de la Coronación, A mediodía, la Virgen procesionó hasta la Parroquia de San Pedro y San Pablo. Los actos finalizarían el día 4 con la despedida de la Virgen en su retorno al Santuario

       

¡Oh Madre Santa de Tiscar!

Quesada entera te aclama.

A gloria canten los niños

a gloria repiquen campanas.

En la cruz del Humilladero

a gloria toquen las palmas.

¡Viva la Virgen de Tiscar!

Reina y Madre de Quesada.

Bella flor de primavera,

Señora y dueña del alba.

Consuelo de los afligidos,

paz y sosiego del alma.

En el corazón de tus hijos,

han florecido plegarias.

¡Virgen bendita de Tiscar,

dirígenos tu mirada

mientras vamos caminando

por este valle de lágrimas.

Ruega, abogada nuestra,

por tus hijos de Quesada,

a Jesús, fruto bendito,

el Hijo de tus entrañas.

Al que es Alfa y Omega,

Jesucristo, nuestra Pascua.

¡Aleluya!¡Aleluya!

¡Canta, aleluya, Quesada!

Al que es Señor de la historia

y dueño de nuestras almas.

Es el Hijo de Dios, Padre,

su definitiva Palabra.

El que la Virgen de Tiscar

siempre lleva en su falda.

¡Quesada, canta Aleluya!

que el Hijo de María,

bendice tus gentes y casas,

los campos y tus olivos,

los trabajos y tu esperanza.

¡Aleluya Quesada, siempre Aleluya!

que en esta tarde de mayo

de primavera cuajada,

el sol ilumina el rostro

de la rosa mas bella y clara,

es Santa María de Tiscar

Reina y Señora Coronada.

                                                    (Santos Lorente Casáñez)

   Y este es el Himno de la Coronación que se compuso para este acontecimiento:

I

Sobre su sien de azucena,

perfume de rosa y lirio,

tiene la Virgen de Tiscar,

corona de cien zafiros.

Cien zafiros en su sien,

mil reflejos de esmeralda

y diez mil voces cantando

a la Virgen coronada.

Viva la Virgen de Tiscar,

Reina y Madre de Quesada.

II

Porque eres Virgen de Tiscar,

amores del amor mio,.

por los campos de olivares,

vengo yo a Tí peregrino.

Peregrinos a tus pies,

y llegados a tus plantas

diez mil voces van cantando

a la Virgen coronada.

Viva la Virgen de Tiscar,

Reina y Madre de Quesada.

Estribillo

Del verde del olivar

oliva verde,

y del oro del trigal

espiga de oro,

por tu blancura sin par

manos de nieve,

vestida de sol serás

sol de mis ojos,

tu jardín se llenará

vara de nardo,

de gracia, plata y luz

luz de azucena,

plata de luna

gracia serena.

     Tanto la Corona de la Virgen como la del Niño, fueron obra del orfebre pero sobre todo rejero toledano D. Julio Pascual (el último gran rejero de Toledo de quien se dice que la gran reja española muere con el maestro Julio Pascual), realizada con parte de las joyas del tesoro de la Virgen y por las donadas por sus muchos devotos para este fin.
       Antonio Navarrete sería el encargado de enviar cartas a los vecinos para recaudar donativos.

                                                                           (Foto: Instituto de Estudios Giennenses)

Cinco estrellas para la Virgen de Tiscar

Señora de la Sierra y la Campiña,
de nuevo peregrino a tu santuario,
cinco estrellas te doy para corona
de dulce emperatriz de mis ensueños.
Cinco estrellas de barro y de ceniza,
vigilantes y absortas en su ruta.
Son mis cinco sentidos deslumbrados
de rodar por los ámbitos del mundo,
rendidos de mentidas ambiciones,
cansados de la inútil brega triste,
pero fieles aún a las promesas
de aquel tiempo feliz en que los pájaros,
de musas juveniles me tejieron
canciones de esperanza florecida
en tu Cueva del Agua y tu Castillo,
en el alto Palomar en que Tú reinas
pequeñita, morena y milagrosa.
Piropos que mi pluma cincelada,
repetidos con máximos fervores
en el largo discurso de mi duelo.
Retorno aquí otra vez con cinco estrellas,
flechas de luz que tu bondad mantiene,
lavántalas, Señora, hasta tus nimbos.
Que el tacto que me diste para alzarme,
que mis ojos, mis manos y mi lengua,
no los manche jamás con torpe fango.
Mis cansadas estrellas nada valen,
pero guardan la fe de mis mayores.
Y en nombre de la tierra en que he nacido,
del cielo que he soñado eternamente,
recíbelas con gracia medianera,
serán, por tu sonrisa, clara lumbre
del fuego en que se abrase tu corona.

                              Rafael Láynez Alcalá.

                                                                     

                                                                           (Instituto de Estudios Giennenses)